El banco central peruano (BCRP) ha dejado los tipos sin cambios en el 4,25% en su reunión del 9 de mayo, como se esperaba en el mercado, llegando a los dos años de estabilidad al mismo nivel. El comunicado emitido tras la decisión tampoco ha variado prácticamente en una situación de inflación dentro de los objetivos.
Aunque no vemos una desaceleración fuerte de camino, creemos que los datos del primer trimestre mostrarán un PIB expandiéndose por debajo del potencial por la decepción de las exportaciones reales. De cara en adelante, vemos la posibilidad de que el BCRP adopte un tono cada vez más blando, en caso de que las cifras del segundo trimestre no se acerquen al 6% interanual. La conocida preocupación del banco por las ganancias del PEN también podría ser importante. No esperamos que la actividad ronde considerablemente por debajo del potencial por mucho tiempo y creemos que la inflación base no ofrecerá alivio suficiente, con los tipos en espera hasta el final de 2013, aunque los riesgos a la baja han crecido.