Los tiburones de las divisas rodean a los emergentes: las reservas, la clave
Las menguantes reservas de divisas extranjeras se han convertido en
el último caballo de batalla entre los inversores y los países
emergentes, que luchan denodadamente para acabar con la peor crisis
monetaria desde 2008.
Y las naciones que tienen menos reservas
para intentar defender su moneda van a seguir siendo presionadas, tal y
como muestras los precios de las opciones. El peso argentino, la lira
turca, la rupia indonesia, el rand sudafricano y, especialmente, la
grivna ucraniana son las que acumulan mayores apuestas bajistas de los
inversores, según los datos de Bloomberg.
"Si empiezas a
quemar demasiado rápido tus reservas extranjeras, es una mala señal, y
por supuesto el mercado de divisas huele la sangre", explicó Robbert Van
Batenburg, de Newedge Group. "Crea un efecto dominó".
Los
mercados emergentes están bajo lupa desde que la Reserva Federal de EEUU
comenzara a reducir sus estímulos récord y economías como China dieran
algunos signos de debilidad. La reacción de estos países ha sido
utilizar sus reservas de dólares para compensar esta retirada de
billetes estadounidenses y tratar así de defender su moneda.
Turquía, por ejemplo, se ha 'comido' ya el 27% de sus reservas
extranjeras, y actualmente es el país emergente con peor posición para
continuar haciéndolo. La lira se encuentra en mínimos de más de cinco
años frente al dólar y su banco central ha tenido que tomar medidas de
emergencia y subir con fuerza los tipos de interés hasta el 12% para intentar revertir la situación. La India también ha subido los tipos, y Sudáfrica también.
"Quemar las reservas no es sostenible", afirmó Viktor Szabo, gestor de Aberdeen Asset Management a Bloomberg. "La gente estará más que contenta de apostar contra tu moneda. La presión estaba ahí y seguirá habiendo más presión."
"Se pueden considerar las reservas de divisa extranjera como un amortiguador de shocks en
tiempos de volatilidad, permitiendo a los bancos centrales sostener su
moneda ante fuertes caídas introduciendo más dólares en el mercado",
explicó Robin Brooks, analista de Goldman Sachs, en un informe. "Los
países con menor cobertura de reservas son relativamente más
vulnerables".
Elevar los tipos de interés como han hecho Sudáfrica o Turquía, tiene
un incoveniente, como recuerda Citigroup, y es que pueden desencadenar
un "círculo vicioso" de menor crecimiento. "Los mercados emergentes más
vulnerables se enfrentan al riesgo de un crecimiento más débil y unos
mayores tipos de interés, lo que afecte a los activos locales. Si ello
provoca a su vez salidas de capital y mayor debilidad de la moneda,
puede haber nuevas subidas de tipos". Ese es el círculo vicioso del que
alertan desde el banco estadounidense.
"Yo no estaría corto basándome exclusivamente en que tengan pocas reservas", puntualizó Ilan Solot, estratega de Brown Brothers Harriman. Pero "si
no empiezan a actuar conjuntamente, y si siguen mermando las reservas,
entonces nos estaremos acercando peligrosamente a una crisis de divisas.
Es una idea inquietante".
Por el momento, Indonesia es el primer país que ha abandonado el uso
de reservas para defender su moneda tras gastar 20.000 millones en siete
meses el año pasado y no conseguir nada. En su lugar, ha reducido los
subsidios a la gasolina para recortar el déficit y ha subido los tipos
de interés, lo que, de momento, le ha permitido estabilizar la rupia en
2014 e incluso ha subido un 0,2% frente al dólar.
"Todo el mundo está tratando de subir los tipos de interés", explicó
Simon Quijano-Evans, jefe de análisis de mercados emergentes de
Commerzbank en Londres. "Es el primer paso para calmar la situación. No
puedes continuar usando las reservas extranjeras si nadie cree en tus
políticas", concluyó.