El nuevo presidente de Irán se centrará en evitar más sanciones ante una mano económica más débil
El gabinete de expertos tecnócratas del nuevo presidente iraní, Hassan 
Rouhani, podría ser capaz de conseguir tiempo para que el gobierno 
implemente su agenda nuclear. Seguramente surgirán divisiones en la 
coalición internacional y el gobierno de Obama es probable que se 
enfrente ante el congreso, defendiendo una postura menos dura en las 
negociaciones con Irán, cuya economía ya está en graves apuros. El 
tradicional excedente comercial del país se está convirtiendo en déficit
 y eso podría ejercer presiones sobre la moneda. Los riesgos 
relacionados con Irán para el mercado del petróleo podrían volver a 
salir a la luz si una interrupción de las conversaciones conduce a más 
sanciones y amplía los efectos de otros choques al suministro en Irak y 
Libia. Sin embargo, seguimos pronosticando un colchón amplio en el 
mercado petrolero, en especial cuando se enfríe la demanda a finales de 
año. 
